Ya empezado marzo, seguimos con muy buenas intenciones, no lo dudo, pero sin nada en concreto y real donde poder asirse por parte de este sector que, cada día, se encuentra peor, siendo, sin duda, uno de los más afectados, con, de momento, nulas ayudas.

Efectivamente, esta semana hemos visto como la Interprofesional del vino de España se ha reunido en el Ministerio de Agricultura, reclamando las máximas ayudas posibles y exponiendo la verdadera situación del sector vitivinícola español, conociendo cómo está y las necesidades perentorias que tenemos. La respuesta, y ya digo que no les otorgo mala intención, por parte de los representantes del ministerio es citarlos para una nueva reunión a finales de marzo, ya que el 22 de marzo hay consejo de ministros en la Unión Europea, y a ver si de ahí sale ya algo, y se reúnen para hacer una valoración de los avances habidos, si es que los hay…
Tengo que decir también que ya lo pide todo el mundo, sindicatos agrarios, todo tipo de asociaciones e incluso las autonomías de todo signo político.
Con todo esto quiero dar a conocer que el casi total espectro del negocio del vino está reclamando con la máxima urgencia, que se tomen medidas de ayudas lo más amplias y rápidas posibles.
Ahora veamos la realidad y es que mucho me temo que si desde la administración se aplaza hasta últimos de mes para ver “si hay avances”, tendremos que calcular, mínimo otro mes para que esos avances, con suerte, se comiencen a convertir en realidades, ya estaríamos en mayo, publica la orden o el decreto, da un plazo de presentación de ofertas (de destilación, vendimia en verde o inmovilización, da igual lo que hagan, pero me voy a ceñir más a la destilación, que parece ser por donde apuntan los tiros…) una vez recibidas las ofertas hay que publicar el posible, o más bien seguro prorrateo entre lo ofertado y lo que se puede acoger según las ayudas, abre el plazo de entrega y estamos, como el año pasado, sobre junio o julio para poder entregar los vinos a destilerías, que lo deberían quemar en pleno verano con la consiguiente merma y perjuicio para las destilerías. Mientras tanto las naturales quejas por el precio puesto a esta destilación (sea el que sea).
Resultado, efectividad, igual a cero patatero o prácticamente cero, en esas fechas la campaña ya está hecha y ya casi en vísperas de vendimias, que se retiren de los mercados una parte pequeña de lo que, por desgracia, vamos a tener, no sirve de nada, si, que tendremos, dos, tres o cinco millones de hectolitros menos, malo no es como es natural, pero efecto ante el mercado no tiene ninguno.
Y es que ya sabemos como anda todo esto cuando de política se trata, más si tiene que ir a Europa, con pesados engranajes hasta que la rueda se mueva.
Estamos de acuerdo que pueden decir que no hay culpables, pero, sinceramente les digo, que para mi si que los hay, desde estas líneas estamos reclamando esto desde prácticamente terminada la vendimia, lo pueden leer todos ustedes, ya que no había que ser ni el más listo de la clase para darse cuenta de la situación como estaba, como está y como va a estar en los próximos meses. Y si se sabía como estaba esto, no es de recibo que se diga que en el Consejo de Ministros europeo del 22 de marzo veremos lo que sale, no, se tenia que haber pedido en el de noviembre, diciembre como mucho y a estas alturas quizá así ya tuviéramos entregado y retirado este vino del mercado, con el consiguiente efecto que podría tener sobre el mismo, tanto económicamente, como psicológicamente, entonces si podríamos ver si esta medida es realmente efectiva o no, pero en junio o julio, no hace nada, como antes les digo. No es que sea adivino, pero escrito queda, yo siempre digo que lo que pienso, como lo dejo por escrito, siempre sirve para errar o acertar, pero que queda constancia, y ya verán ustedes como antes de junio no hay nada de nada. Ojalá me equivoque, seria el primero en alegrarme.
No quiero terminar sin comentarle una frase que esta semana ha dicho el presidente de Castilla La Mancha, Page, en unas declaraciones vertidas en la inauguración de las nuevas instalaciones de embotellado de la cooperativa Virgen de las Viñas. Y es que, textualmente dijo: “Necesitamos poner un suelo al precio del vino de tal manera que lo que queda de campaña se desarrolle en mejores condiciones”. Ya lo he comentado, esta frase, el inicio, sobre todo, depende de qué sentido le dé, es muy peligrosa o no, poner un precio mínimo al precio del vino, desde el punto de vista obligatorio “por decreto” es muy grave, además de que creo que sería ilegal y una utopía, si solamente es un deseo, bueno, eso lo tenemos todos. Esperemos a ver si se aclara o lo aclara.
Y termino como empiezo, refiriéndome al tema central de este artículo, las ayudas se hablan, pero no nos llegan, ya estamos, por desgracia acostumbrados a que en esto casi siempre, por parte de la administración se llegue TARDE, MAL Y NUNCA…
Por el día que es hoy, quiero ponerles simplemente un ejemplo: hará 25 o 30 años en una cooperativa, como es normal no daré nombres, contrataron a una enóloga, el presidente dijo que de ninguna manera una mujer se iba a encargar de la responsabilidad de elaborar el vino, estando en sus manos la economía de todo el pueblo (que conste que este presidente tenia carrera universitaria). No recuerdo, y no quiero mentir, si el presidente dimitió o despidieron a la enóloga, creo que fue lo primero.
Hoy día, no solo hay grandes enólogas elaborando grandes vinos, también mujeres llevando grandes bodegas de España, es lo más normal del mundo y a nadie extraña. También cada vez más en las juntas rectoras de las cooperativas. Aún queda camino por andar, es cierto, pero la inclusión de la mujer en el mundo del vino es una agradable realidad.
Todo esto gracias al trabajo de muchas de ellas, algunas, y aquí si quiero poner un nombre, como María Isabel Mijares, en su lucha a favor del vino durante décadas y décadas, cuando, como en el ejemplo que les pongo, era muy difícil la situación, y ahora vemos a grandes mujeres, en todos los sectores, enología, empresas, catas, agencias de comunicación, máster wine, etc. cosa que nos alegra a todo el mundo y es, sin duda ejemplo a seguir.
Como digo, creo que aún quedan pasos que dar y espero y deseo los vayamos dando entre todos, seguro que con ellas, el sector mejorará cada día más…
¡¡¡Cuídense!!! Y ya saben, promocionemos el vino… Todos juntos