
Siempre se ha dicho, y con razón, que cuando un jarrón se rompe, lo puedes arreglar con pegamento, pero las grietas de unión se notaran, por lo que el jarrón no quedará igual que estaba antes. Pues eso es lo que nos ha pasado con esta propuesta de que el alcohol puede traer el cáncer a las personas, y esta palabra, por desgracia, siempre suena a algo malo. Hoy por la calle, un vecino me ha parado y me ha dicho: “tu que te dedicas a esto del vino, ¿Es verdad que el vino produce cáncer? Con esto les digo todo.
Efectivamente la votación nos fue, en parte favorable, ya que no nos obligan a poner en la etiqueta que el vino es nocivo para la salud. Pero si se dice y se aprueba comentar en el ámbito de la salud comunitaria que el consumo nocivo del alcohol es perjudicial para la salud, y factor de riesgo para contraer cáncer. Y se dice el consumo nocivo para no confundirlo con el consumo moderado, claro que no especifican hasta donde es consumo moderado y a partir de cuanto es nocivo, por lo que abren un amplio espectro de comentarios y que haya quien estime que una copa de vino puede ser nociva y quien diga que, por ejemplo, beberse una botella no lo es.

Me ha extrañado sobremanera leer que ha habido diputados españoles que votaron a favor de que si se pusiera en las etiquetas del vino que era perjudicial y puede producir cáncer, además, algunos de zonas con amplia tradición vitivinícola, intrínseca en su cultura, sin pensar el daño que podían hacer a su zona esto y la cantidad de puestos de trabajo y familias que viven de esto y que se puedan ver perjudicadas enormemente, se debería publicar para que la gente lo supiese.
El daño está hecho, puede ser de menor impacto que si se hubiera aprobado en todos sus términos, estamos de acuerdo, pero beneficiar no nos beneficia en nada. Algo de consumo nos quita con toda seguridad y crea en muchas personal el temor o la duda de que esto pueda ser verdad. Una pena.
Tras esto hay que tener en cuenta que tenemos otros dos temas pendientes y que se discutirán antes del verán o según nos indican, el del impuesto al vino y el de quitar las subvenciones a la promoción del vino. El caso es que no nos dejen en paz
Como buena noticia de esta semana, sin duda el constante incremento del consumo interno de vino en España, habiendo subido en el último año un 14,2%. Y superando ya los 10 millones de hectólitros de consumo, concretamente en 10’446, cuando el año pasado apenas si superábamos los 9. Aún no llegamos a superar los 11 que teníamos antes de la pandemia, pero llevamos buen paso. Y no sitúa en 22,6 litros per cápita de consumo al año. Muy inferior al consumo de otros países semejantes a nosotros, pero que también va al alza, les recuerdo que hemos estado por debajo de los 20 litros bastante tiempo.
En fin, el primer envite lo hemos superado, y no es poco ya que nos hubiera perjudicado enormemente, ahora en los que quedan el del impuesto estimo que es el más preocupante y el que más daño aún nos produciría, esperemos que tengamos la suficiente fuerza en Bruselas, entre los países productores para poderlo frenar, al igual que el de la promoción.
No puedo terminar sin volver a comentar la falta de lluvias que tenemos en la practica totalidad de España, cada día, cada semana que pasa es más acuciante y más necesario que llueva y lo haga abundantemente y generalizado en toda España, no cabe duda que si no llueve lo vamos a notar bastante en la cosecha.
¡¡¡Cuídense!!! Y ya saben, promocionemos el vino… MEJOR CON VINO