Los premios se crearon “con el objetivo de editar un folleto de propaganda sobre el consumo de vino, destinado a los niños de las escuelas de todos los países del mundo”.
En 1930, en el 24.o BOLETÍN INTERNACIONAL DEL VINO, la OIV – que por entonces era la Oficina Internacional del Vino, creada el 29 de noviembre de 1924- publicó el reglamento relativo a la primera edición de los Premios de la O.I.V.
Se trataba de una convocatoria de candidaturas para la redacción de textos y leyendas en francés o en uno de los idiomas de los países “adherentes” a la OIV y para la ilustración de este “folleto de propaganda” a favor del vino y sus beneficios para la salud, titulado: “La Verdad sobre el Vino”. Los competidores debían señalar las diferentes virtudes del vino desde “la primera infancia”: “tónico” o “vehículo medicinal de pequeñas dosis prescritas por el médico”. Además, debía especificarse que, a partir de los 10-12 años, “una dosis moderada de vino debía formar parte de las principales comidas”. Finalmente, por lo que respecta a la edad adulta, para los “individuos sanos, se debía insistir en todos los motivos beneficiosos del consumo de esta bebida”.
En Francia, en el contexto de la lucha contra las leyes prohibicionistas promulgadas en los Estados Unidos, todas las campañas de propaganda de la década de 1930 a favor del consumo (moderado) de vino se ilustraban con la frase de Louis Pasteur: “El vino es la más sana e higiénica de las bebidas”. Aquí, una recompensa con la efigie de Louis Pasteur, que era el premio que se entregaba a los “Bon Point” en las escuelas.